Capitulo N° 34
Lali estaba terminando su día, última noche en la casa de Nico por lo
que se estaba preparando la valía y las pocas cosas que tenía en ella. En los
últimos meses había pasado por muchas cosas, más bien en los últimos años, pero
ese día en particular había sido el más denso y feliz de su vida. Había pasado
del llanto y las lágrimas a la alegría de ser libre y feliz junto a los suyos y
por los que por tantos años la habían separado.
Mientras empezaba a armar su valija, le golpearon a la puerta y más
que Nico no podía ser, eran los únicos dos en la casa.
Nico: Permiso La
Lali: Nico, Pasa (Mientras guardaba parte de su ropa)
Nico: Que difícil es verte haciendo la valija (Con sus manos en los
bolsillos mostrando vergüenza)
Lali: Jajaja porque lo decis?
Nico: No sé, me acostumbre estos tres meses a
tener a alguien en la casa, no voy a tener quien me rete porque dejo
todo tirado, o me ayude a limpiar o cocinar, ni que hablar que voy a extrañar
el cotorreó de la noche de chicas
Lali: Jajaja más tierno (Semi abrazándolo fugazmente) igual a no ser
que te vuelvas a Estados Unidos no vamos a dejar de vernos, ni que hablar que
te convertiste en uno de mis mejores amigos y vas a estar presente siempre.
Nico: Jajaja, ni loco me vuelvo a Estados Unidos, me re acostumbre a
estar con mi familia otra vez y a tener a mis amigos cerca. Además por el
desempeño que tuve hacía para con vos y la situación me dieron la posibilidad
de ascender
Lali: Y??? que dijiste?
Nico: Que si, ahora comando el servicio de protección y de fuerzas
especiales.
Lali: Bien ahí felicitaciones loquito! (Abrazándolo)
Nico: Bueno nada, venia solo a decirte eso, que me hizo muy feliz
tenerte estos tres meses acá en casa, fue un placer y sabes que para cuando
quieras volver tenes todo el lugar del mundo.
Lali: Gracias a vos, por tanto Nico. Te hiciste querer muchísimo
estos meses.
Nico: Bueno eso, te dejo que termines tranquila. Cualquier cosa estoy
en el living (Yéndose con la mirada Triste)
Aunque a Lali le doliera dejar la casa de Nico y dejar de convivir
con el que gentilmente ofreció su casa para que ella fuera una testigo
protegido, ella aspiraba a más cosas; entre ellas vivir un tiempo en la casa de
sus padres, disfrutar de ellos al máximo posible al igual que de sus hermanos y
de Santino su sobrino que estaba próximo a ver el mundo en los siguientes tres
meses y disfrutar cada momento y cada segundo de su vida a amar a la persona
que la había salvado de tanto dolor, a su novio.
Hasta que armara su departamento como ella siempre lo había soñado y
por lógica seguir trabajando y la carrera que tanto amaba; que a decir verdad
tener un suegro abogado, trabajar en un estudio jurídico, tener cierto amor por
la carrera y haber leído muchos libros
sobre el tema no le estaba costando casi nada, en eso debería de sentirse
afortunada, porque había más de un compañero de sus clases que no tenían la
misma facilidad que ella; era un buen plan.
Cuando termino de armar la valija, la dejo en un costado de la cama y
ya preparada y dispuesta para acostarse, su celular comenzó a indicarle una
nueva llamada, por lo que si se acostó pero atendiendo la llamada de su gran
amor.
Lali: Hola Lindo.
Peter: Hola hermosa, como estas?
Lali: Acá acostada, termine mis valijas y estaba cansada. Vos?
Peter: Nada, acá comiendo un sanwich hasta que mama termine de
preparar la comida.
Lali: Jajaja, nosotros con Nico ya comimos, esta medio bajón porque
me voy de la casa.
Peter: Siempre fue de entristecerse si dejaba de ver a una persona a
la que le tomaba cariño, puedo ser eso.
Lali: Si tal vez eso sea, igual ya le dije que no nos íbamos a dejar
de ver. Cambiando de tema señor, con usted tengo que arreglar un temita
pendiente…
Peter: Conmigo?
Lali: SISI, con usted… Usted a mí no me debe algo?
Peter: Algo cómo? (Haciéndose el desentendido)
Lali: Y no sé, yo digo algo
que me debe hace aproximadamente tres meses
Peter: Vos sabes que no me acuerdo (Riéndose)
Lali: Digo, le suena algo como hacerme el amor? (Sonriendo picara mirando
el techo)
Peter: APA, QUE NO TE TENIA TAN DIRECTA Marianita…
Lali: Las mujeres siempre somos unas cajas de sorpresa.
Peter: Veo veo veo. Pero te digo algo? Me gusta lo directo… Asique
decime día, hora y fecha que ahí estaré firme como un soldado
Lali: Bueno bldo, se te fue el romanticismo y el jueguito al carajo.
jajaja
Peter: Bueno che está bien jajaja. Quédate tranquila que cuando menos
me lo esperes te vas a cobrar la deuda.
Lali: QUE LINDO QUE SOS (Mordiéndose el labio)
Peter: Te tengo que dejar amor, la comida está hecha.
Lali: Bueno amor, saludos a toda tu familia. Nos vemos mañana
Peter: Chau mi amor, mañana nos vemos.
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